A quien no le gustas las alitas de pollo, se pueden preparar de muchas maneras, normalmente fritas, al ajilllo, etc. En esta ocasión vamos a prepararlas en adobo acompañadas de unas patatas que se empaparán completamente con la salsa una vez horneado el conjunto. Queda un plato delicioso, económico, facil y rápido de hacer, solo nos entretendremos en la preparación del adobo.
Ingredientes para dos:
- 8 alitas de pollo
- 1 patata grande
- 2 dientes de ajo laminados
- 1 cucharada de pimentón dulce de la Vera
- 1 ramita de tomillo fresco
- 1/2 vaso de vino blanco seco
- Sal
- Pimienta negra recién molida
- Aceite de oliva virgen extra
- Para empezar preparamos el adobo, En un bol o recipiente amplio ponemos cuatro cucharadas de aceite, una cucharada de pimentón, una cucharadita de sal, pimienta negra al gusto (no pasaros) y la ramita de tomillo, removemos bien hasta que todo esté bien integrado. En ese adobo metemos las alitas que habremos cortado desechando el extremo mas fino (que guardaremos en el congelador para hacer caldo), mezclaremos bien para que queden bien impregnadas por todas partes, taparemos y las meteremos en la nevera al menos media hora.
- Mientras las alitas reposan, pelamos la patata, la cortamos en bastones y las ponemos a freír en una satén u otro recipiente que pueda ir al horno con una buena cantidad de aceite. No hay que freírlas del todo, en cuanto empiecen a ablandarse las retiramos de fuego y escurrimos el aceite.
- Una vez listas las patatas, echamos las alitas con todo el adobo sobre ellas y añadimos el vino, llevamos al horno precalentado a 180º hasta que estén doraditas, unos veinte minutos, pero ojo, hay que vigilarlas, pues según el horno pueden hacerse antes o necesitar mas tiempo. Retiramos la ramita de tomillo y a degustar esta delicia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario